Producción audiovisual y fotografía.
El video, acompañado de imágenes impactantes al ritmo de la música clásica, presentó la sinfónica no solo como una institución cultural, sino como un símbolo del alma yucateca. A través de testimonios e imágenes que exaltaban el arte y la entrega de los músicos, logramos generar empatía con el espectador, poniendo en el centro a quienes han mantenido viva la música. También realizamos sesiones fotográficas para medios impresos y digitales, manteniendo una estética emotiva y profesional. Posteriormente, se produjo un segundo video promocional para un evento anual de recaudación de fondos, grabado en una histórica casona del estado, evocando tradición, elegancia y pertenencia. El evento alcanzó su máximo foro de asistencia, reactivando el interés de nuevos donantes.
La Orquesta Sinfónica de Yucatán se enfrentaba a una preocupación creciente: el desinterés del público general por apoyar económicamente a las artes. El patronato se acercó a Trozzo Lab con la necesidad de crear un mensaje poderoso, capaz de conmover y reactivar el compromiso de la sociedad con la cultura. Nuestra respuesta fue una pieza audiovisual pensada para emocionar desde la primera nota.
El proyecto logró su objetivo principal: devolver a la Sinfónica el protagonismo emocional que merece en la comunidad. Más allá de crear una pieza audiovisual, construimos un puente entre la orquesta y la sociedad, reactivando la sensibilidad del público hacia la importancia del arte y la cultura en la vida cotidiana. El video generó conversaciones, inspiró nuevas donaciones y tocó fibras profundas en quienes alguna vez conectaron con la música clásica. La Sinfónica se reafirmó como un símbolo vivo del alma cultural de Yucatán.